Chiste para adultos, y si eres sensible:
Favor de detener la lectura.
Fantacías en el avión.
Resulta ser: que todos los jueves sale un vuelo directo de la ciudad de México con destino a la ciudad Puerto Vallarta, en el estado de Jalisco, y muy puntual su salida.
Sale a las 11 de la noche, para llegar puntualmente a la una de la mañana a su destino.
Van subiendo algunos pasajeros.
De echo en esta ocasión: no pasan de 30, así que en cierto modo el avión iba un poco solo.
El piloto dá las recomendaciones de rigor antes del despegue, y sin más: el avión comienza a elevarse.
Para comodidad de los pasajeros: apagan las luces interiores del avión para dormir almenos 90 minutos.
5 minutos luego del despegue: 2 tipos voltean a ver al resto de pasajeros que estaban distribuidos por todo el avión, y resulta que estos 2 pasajeros particularmente eran de esos sin violencia, y uno dice al otro:
Amor: ¿Sabes algo?
¿Ahora qué mosca te pica?
Es que tengo una fantacía de que lo hacíamos en el avión...
¡No seas escandalosa! ¿No ves que no están dormidos? aunque lo parezca.
Te voy a demostrar que están dormidos.
El fantacioso se levanta y se para en medio del pasillo y comienza a pedir de favor le dieran un cigarro, pero no parece que los pasajeros despertarían, luego vuelve al aciento, y por fín convence a su pareja, así que comienzan la faena.
Brincos en el aciento, una, otra y otra vez como por 30 minutos, luego se vuelven como si nada a sus lugares.
30 minutos antes de aterrizar: el capitán avisa que van a aterrizar, y las recomendaciones de rigor para el aterrizaje.
Las asafatas en su labor al respecto, pero a una le llama especialmente la atención un viegito que estaba casi congelado por el frío dado
por el aire acondicionado.
De milagro logran reanimarlo, y la asafata le comenta:
¡Óigame viejo tonto! ¡Almenos debió pedir una manta para el frío!
El viegito replica:
¡Ni de pedo!
Hace 40 minutos un tipo se paró a pedir cigarros y se lo cogieron.